Reseña Histórica
Julio Rubén Sartorio
(09-07-1930 – 27-03-2000)

QUERIDO Chapa:
Naciste allá por los pagos de Coronel Suárez, un 9 de julio de 1930 y ya al poco tiempo le empezaste a dar a la redonda, tal es así que con solo 19 años y por esos tiempos ya jugabas partidos oficiales de Liga y cuando menos lo pensaste te encontraste siendo Campeón y goleador con Alumni de Azul el 19 de noviembre de 1950. A partir de ahí empezó tu verdadero derrotero y estuviste por el Sur más precisamente por el Bella Vista de Bahía Blanca y también pasaste por Rosario Puerto Belgrano de Punta Alta. En 1954 ya estabas por la feliz y ese año saliste Subcampeón de 1era. B con Peñarol, después anduviste por Norte allá por 1961, en el 1962 integraste el combinado de Mar del Plata en el Campeonato Argentino. Continuaste tu campaña en Nación y el 19 de octubre de 1963 saliste Campeón y ascendiste a 1era. “A”, luego de superar a Once Unidos por 1 a 0 con un gol tuyo a los 36” del segundo tiempo, seguiste en Nación durante 1964 y en 1965 pasaste a Once Unidos en donde tuviste de compañero a otro bancario del provincia como Julio Carrique, y una particularidad de ese año fue un partido disputado el 4 de julio de 1965 contra Atlético Mar del Plata en donde hiciste dos goles y uno Julio desde 45 metros, pero el resultado favoreció a los decanos que se impusieron por 4 a 3.

Por el año 1966 también participaste una temporada en el Club Nueva Pompeya, para luego si despedirte al año siguiente en Deportivo Norte con el cual ganaste el Campeonato de ascenso a primera división.

Se que tu carrera fue mucho mas larga y mucho mas rica de lo que pude expresarme, pero simplemente quería recordar a un apasionado del fútbol que llegó a jugar hasta los 60 largos y que además vistió la casaca de Expobanc (Gcia.MdP.), durante muchos campeonatos internos que organizaba el Club y la Asociación Bancaria, para finalmente terminar en los hermosos picaditos de los jueves en las instalaciones del Club Banco Provincia en el Parque las Dalias, donde seguías demostrando las grandes dotes de goleador. Creo estimado Chapa, que todos los que te conocimos, estamos muy contentos de estas pocas pero sentidas palabras para recordar y homenajear a un tipo humilde, sencillo y bonachón, que supo hacer del deporte un culto a la amistad.

Salute Campeón.